Cáncer de hueso en perros
Urgencia: Lo antes posible
Pronóstico: Malo

Los perros pueden sufrir distintos tumores de hueso. El más frecuente es el osteosarcoma que representa el 85% de los tumores esqueléticos y afecta principalmente a los huesos largos de las extremidades de los perros de razas grandes.

Pero también encontramos el fibrosarcoma, el condrosarcoma y el hemangiosarcoma.

Síntomas

Hinchazón, cojera y dolor en las articulaciones o los huesos. En algunos casos, los perros que sufren de cáncer de huesos aparecerán cansados o con falta de apetito. Ocasionalmente, los perros mostrarán una inflamación o masa dolorosa alrededor del sitio del tumor. Suelen aparecer fracturas sin evidencia de trauma.

En el caso del hemangiosarcoma de hueso, el perro también presentará membranas mucosas pálidas (es decir, fosas nasales, labios, oídos o genitales) y anemia debido a la pérdida de sangre por la ruptura del tumor.

Causas

Desconocidas.

Diagnóstico

Normalmente el veterinario detecta un cáncer óseo por imágenes realizadas con aparatos de imágen como los rayos X.

El veterinario para confirmar si la masa detectada es un tumor normalmente utilizará una prueba citológica de una muestra por aspiración obtenida con una aguja fina. Esta prueba es más económica que la prueba definitiva que sería realizar una biopsia del tumor y ofrece una precisión del 80% aproximadamente.

Si con las pruebas de imagen y la prueba citológica el veterinario no tuviera claro el diagnóstico, entonces realizará una biopsia. En este caso el veterinario recogerá para su análisis una muestra del hueso. Es una prueba más invasiva que tiene algunos riesgos como incrementar la cojera del perro o la fractura del hueso.

Tratamiento

Normalmente la solución más aconsejable es la cirugía. En los casos graves, podría tener que ser amputada alguna extremidad o extraer algún hueso para evitar la reaparición del tumor. Para evitar la reaparición también sería aconsejable realizar algunas sesiones de quimio.

Si el tumor no fuera operable se tratará con quimioterapia. 

El veterinario probablemente también recetará medicamentos para control del dolor y para reducir la inflamación.