Pérdida de movimiento e incapacidad para caminar, masa que se puede palpar en el hueso afectado, hinchazón en el sitio, dolor cuando se toca el área y fracturas de hueso sin evidencia de trauma.
El fibrosarcoma es el resultado de la división anormal de las células fibroblásticas que se originan en el hueso, debilitando la estructura del hueso. Esta condición conduce a fracturas e incluso a amputaciones. En la mayoría de los casos, el fibrosarcoma del hueso es benigno y no produce metástasis.
A diferencia del osteosarcoma, una forma más común de cáncer de hueso compuesto de material óseo, el fibrosarcoma se compone de material de colágeno fibroso.
Hay dos tipos principales de fibrosarcoma del hueso:
Pérdida de movimiento e incapacidad para caminar, masa que se puede palpar en el hueso afectado, hinchazón en el sitio, dolor cuando se toca el área y fracturas de hueso sin evidencia de trauma.
La causa exacta para el fibrosarcoma del hueso aún se desconoce.
Un examen físico, acompañado del historial completo de la salud de la mascota con información pertinente de posibles incidentes y rutinas de ejercicio, permitirá establecer una visión general. Además, se incluirán pruebas de laboratorio que incluyen análisis de orina, hemograma completo y perfil químico sanguíneo.
Asimismo, un examen de rayos X será un factor importante en el diagnóstico definitivo para diferenciar entre un quiste o inflamación del músculo. Los rayos X también permitirán conocer la ubicación exacta del tumor primario, así como detectar metástasis. La tomografía computarizada es otra herramienta útil para determinar la extensión del problema.
La biopsia del tumor, a pesar de tratarse de un procedimiento invasivo, es la única forma que permitirá confirmar si el tumor es benigno o maligno.
El tratamiento del fibrosarcoma del hueso generalmente implica intervención quirúrgica para eliminar el área alrededor del tumor, o extraer una parte del hueso afectado. En los casos más graves, la extremidad afectada tendrá que ser amputada por completo.
Después del tratamiento inicial, se planificará un chequeo de seguimiento para monitorizar regularmente cualquier nuevo crecimiento del tumor o metástasis a otras áreas del cuerpo. Deberá establecer un horario para visitar a su veterinario para chequeos de progreso.
Una recuperación completa dependerá del tamaño y la ubicación del tumor. Sigue las instrucciones cuidadosamente en caso de administrar analgésicos, limita la actividad física de tu perro dejándolo en un lugar tranquilo donde pueda descansar y si es necesario, aliméntalo usando un tubo de alimentación o un suplemento liquido de alto contenido de proteína. El veterinario te indicará cuándo es seguro que el perro haga ejercicio.