El defecto ocurre en uno de tres lugares: en el tabique auricular inferior (defecto del ostium primum, que es el más común), cerca de la fosa oval (defecto del ostium secundum), o en el craneodorsal de la fosa ovalis (defecto venoso sinusal). Los signos más comunes son:

• Intolerancia al ejercicio
• Desmayo/pérdida del conocimiento (síncope)
• Dificultad para respirar (disnea)
• Tos
• Soplo cardíaco
• Piel azulada (cianosis)
• Acumulación de líquido en el abdomen (ascitis) si se presenta insuficiencia cardíaca derecha

Se adquiere al nacer. Las causas aún son desconocidas.

El veterinario realizará un perfil bioquímico, análisis de orina, hemograma y panel de electrolitos tras realizar un examen físico. Sin embrago, el diagnóstico definitivo sólo es posible después de hacer radiografías y electrocardiogramas, que mostrarán agrandamiento en los vasos del corazón y del pulmón. Además, podrán evidenciarse arritmias y anomalías en la conducción intraventricular del corazón. 

La ecocardiografía Doppler servirá para documentar el flujo sanguíneo a través del tabique y la elevada eyección a través de la arteria pulmonar.

Las mascotas con insuficiencia cardíaca congestiva deben hospitalizarse hasta que se estabilicen. Los defectos de comunicación interauricular del tipo secundum (tabique interauricular) se pueden corregir implantando un dispositivo amplatzer (dispositivo de doble disco) para cerrar el orificio. La cirugía a corazón abierto puede corregir el defecto. 

El pronóstico depende del tamaño del defecto del tabique auricular y de los efectos hemodinámicos de la comunicación. 

Deberá restringir la actividad física de su mascota.