Depósitos de proteínas en el hígado (amiloidosis) en gatos
Urgencia: Puede esperar
Pronóstico: Malo

La amiloidosis hepática es la deposición de la proteína amiloide en el hígado a menudo como una forma secundaria a un trastorno inflamatorio o linfo-proliferativo subyacente. 


Síntomas

Por lo general, la amiloidosis primero desarrolla signos renales, aunque en algunos casos se desarrollan síntomas de insuficiencia hepática primero.

  • Pérdida de apetito
  • Exceso de sed y exceso de orina
  • Vómitos
  • Palidez
  • Abdomen agrandado
  • Líquido abdominal – sangre o líquido claro
  • Piel amarillenta y/o blanco de los ojos
  • Hinchazón de los miembros
  • Dolor en las articulaciones
  • Falta de energía


Causas

Trastornos inmunes familiares, infección crónica, neutropenia cíclica (disminución de glóbulos blancos), endocarditis bacteriana, inflamación crónica y tumores son solo algunas de las causas que puede desencadenar la amiloidosis.

Diagnóstico

Deberá proporcionar un historial completo de la salud de su gato, incluido un historial de síntomas y la naturaleza del mismo así como posible incidentes que lo haya provocado. El veterinario ordenará un perfil químico de sangre, un hemograma completo, un análisis de orina y un panel de electrolitos acompañado de un examen físico completo.  El perfil químico de la sangre puede mostrar un nivel alto de enzimas hepáticas.

También se debe realizar un perfil de coagulación para verificar la función hepática e imágenes de rayos X y ultrasonido, que permitirá revelar anormalidades en el híagado.

Si el veterinario lo viera necesario, tomará muestras del tejido del hígado y órganos circundantes para su análisis. A los gatos con hinchazón en las articulaciones se les deben tomar muestras en las articulaciones para la citología y de esta forma confirmar o descartar la presencia de tumores malignos. La composición de cualquier fluido que se haya acumulado en el abdomen también se puede analizar en el laboratorio.

Tratamiento

Este síndrome es difícil de tratar y tiene un mal pronóstico. El veterinario tratará de minimizar los efectos de la enfermedad

El veterinario realizará transfusiones de sangre en caso que el gato haya perdido mucha sangre o una intervención quirúrgica si detectara que el lóbulo del hígado se ha roto.