Endocardiosis de la válvula atrioventricular en perros
Urgencia: Lo antes posible
Pronóstico: Reservado

Con la endocardiosis se desarrolla un exceso de tejido fibroso en las válvulas auricoventriculares (AV) que afecta tanto la estructura como la función de las válvulas. El exceso de tejido provoca un engrosamiento, rigidez y distorsión de las válvulas AV lo que conduce a una insuficiencia cardíaca congestiva. El mal funcionamiento de las válvulas atrioventriculares (válvula mistral y tricúspide que conectan la aurícula y el ventrículo izquierdo y derecho respectivamente) provoca que el corazón no bombee correctamente la sangre y tenga que trabajar más de lo normal para satisfacer las necesidades del animal y acaba provocando la muerte en los perros afectados. 

Las razas pequeñas como Chihuahuas, Malteses, Pomeranias, Cocker Spaniels, Pequinés, Cavalier King Charles Spaniels, Boston Terriers, Fox Terriers, Poodles miniatura, Schnauzers miniatura, Pinscher miniatura, Whippets y Poodles Toy son más propensas a la endocardiosis de la válvula AV. Se observa mayor incidencia en perros mayores de 10 años.  

Síntomas

Tos, ortopnea (la respiración se vuelve más difícil cuando se acuesta), intolerancia al ejercicio, dificultad para respirar, debilidad, letargo, desmayo, pérdida de consciencia, distensión abdominal, soplos en el corazón y coloración azul de la piel y las mucosas.

A medida que avanza la enfermedad se agudizan los síntomas.

Causas

La causa es aún desconocida.

Diagnóstico

Tras obtener el historial médico detallado de la mascota, el veterinario realizará un examen físico exhaustivo junto a un análisis de sangre completo, un perfil bioquímico y una prueba de orina. Las pruebas rutinarias estarán acompañadas de diagnóstico visual por rayos X y ecografía Doppler para ver el flujo de la sangre en los vasos sanguíneos. Además, se utilizará la electrocardiografía y ecocardiograma para medir los impulsos eléctricos del corazón.

Tratamiento

En algunos perros se requiere de poco o ningún tratamiento, siendo suficiente el monitoreo regular; mientras que otros pacientes necesitarán de un tratamiento médico extenso o cirugía. La cirugía busca reemplazar la válvula defectuosa sin embargo, los resultados no son prometedores en la actualidad. 

El tratamiento es personalizado y depende de factores como el estado de salud del perro, la progresión de la enfermedad y las complicaciones secundarias que pueda acarrear el tratamiento.

Inicialmente, se recomendará descanso absoluto en jaula y al mejorar, se le permitirá caminar lentamente con correa. El veterinario suministrará un protocolo detallado para la administración de medicamentos, el ejercicio, una dieta especializada con restricción en sodio y cualquier otra información vital para cuidar del perro en casa. 

Se programarán visitas al veterinario todas las semanas durante el primer mes de tratamiento en donde se verificará el progreso del perro con pruebas de laboratorio estándar, radiografías y electrocardiografía.  

El pronóstico a largo plazo depende de la edad del perro, el estado actual de la enfermedad, afecciones recurrentes y la gestión de la salud de la mascota en el hogar.