- Regurgitación
- Dificutad para tragar
- Llantos durante la deglución
- Las comidas líquidas se toleran mejor que las sólidas.
- Pérdida de apetito y de peso a medida que la enfermedad progresa
- Pérdida de musculatura.
- La producción excesiva de saliva y el babeo
- Dolor al tocar el cuello o tórax
- Se pueden detectar sonidos pulmonares o respiratorios anormales, como sibilancias y tos, en gatos con neumonía por aspiración