Glomerulonefritis en gatos
Urgencia: Lo antes posible
Pronóstico: Reservado

La glomerulonefritis es el deterioro de los glomérulos, la red de vasos que filtran los productos de desecho a medida que pasan a través de los riñones durante la formación de orina. La inflamación de los glomérulos se denomina glomerulonefritis y está causada normalmente por la acumulación de complejos antígeno-anticuerpo (como las tóxinas y las enzimas).  

Síntomas

Los síntomas pueden variar dependiendo de la causa subyacente, como la inflamación, la infección o la neoplasia. En algunos gatos, el único síntoma que se presenta puede ser la pérdida de peso y la debilidad. De hecho, muchas veces, la afección se descubre de manera incidental en un examen médico anual de rutina, cuando se encuentran concentraciones mayores de proteínas en la orina. Si la pérdida de proteínas en la orina es grave, el gato puede desarrollar una acumulación anormal de líquido en la cavidad abdominal (ascitis).

En los gatos que padecen una enfermedad avanzada con insuficiencia renal, puede haber síntomas de aumento de sed y de frecuencia de micción, falta de apetito, náuseas y vómitos. Los que tienen una deficiencia grave de la proteína albúmina de la sangre (hipoalbuminemia), pueden sufrir una obstrucción de los vasos sanguíneos del pulmón, lo que provoca dificultades respiratorias o jadeos intensos. La presión arterial alta, por su parte, puede causar ceguera repentina.

Causas

La aparición de la glomerulonefritis es multifactorial, pudiendo ser ocasionada por Inflamaciones, infecciones, tumores neoplásicos, diabetes mellitus, empleo prolongado de medicamentos y, en algunos casos, se desconoce su origen (idiopático).

Diagnóstico

El veterinario realizará un  historial completo, tomando en cuenta la aparición de los síntomas y los posibles incidentes que podrían haber provocado la afección. Además, se realizará un perfil sanguíneo completo y un análisis de orina. 

En casos severos, el análisis bioquímico revelará niveles anormales de albúmina en sangre (hipoalbuminemia) y altos niveles de colesterol en sangre (hipercolesterolemia).   La prueba de proteína en la orina es de utilidad para el diagnóstico de la función renal. Medir los niveles de proteínas y creatinina (producto de desecho excretado por los riñones) le permitirá a su veterinario conocer el grado del daño renal. 

Las radiografías abdominales y la ecografía son herramientas útiles para la evaluación de los riñones y órganos circundantes. Su veterinario podrá realizar una biopsia renal para descartar las causas de insuficiencia renal, como tumores.

Tratamiento

El control efectivo de la glomerulonefritis consiste en eliminación del antígeno causante de la reacción inmune. Pero no siempre es tan fácil detectar el antígeno causante por lo que, una vez desarrollada la insuficiencia renal, el pronóstico es malo. El tratamiento general dependerá en gran medida del agente causal y del avance de la enfermedad. 

Las mascotas con esta afección requieren de dietas bajas en sodio y de bajas cantidades de proteínas. No le suministre ningún medicamento ni incremente las dosis sin consultar antes con su médico. Además, su veterinario programará pruebas periódicas de laboratorio para evaluar la respuesta al tratamiento y la progresión de la enfermedad.