Vómitos, falta de apetito, pérdida de peso, orina y sed excesiva, decoloración amarillenta de las encías y de los tejidos húmedos, acumulación de líquidos en el abdomen, mala condición corporal y lentitud.
La hepatitis es una inflamación del hígado. Este cambio puede llevar a una pérdida de funciones del hígado. Las funciones del hígado son la eliminación de toxinas y la intervención en el proceso digestivo. Por ello, si el hígado pierde sus funciones, muchos órganos se ven rápidamente afectados.
El hígado es un órgano con gran capacidad de regeneración. Tanto es así que se estima que con sólo un 30% de hígado sano sería capaz de volver a reconstruirse.
Vómitos, falta de apetito, pérdida de peso, orina y sed excesiva, decoloración amarillenta de las encías y de los tejidos húmedos, acumulación de líquidos en el abdomen, mala condición corporal y lentitud.
La hepatitis crónica puede estar causada por transfusiones de sangre, toxinas o drogas, enfermedades infecciosas y la enfermedad del almacenamiento de cobre (enfermedad hereditaria que suele aparecer a los 6 años y mayoritariamente en hembras).
El veterinario preguntará por el historial médico, los antecedentes familiares y los síntomas que pudieran estar relacionados. El veterinario realizará una exploración física y un análisis de sangre y de orina para buscar problemas renales.
Para confirmar la inflamación del hígado el veterinario también usará rayos X y ultrasonidos para ver el hígado y en ocasiones podría requerir tomar una muestra de tejido para una biopsia.
Si el perro está grave deberá ser hospitalizado. Probablemente necesitará una terapia de fluidos con vitamina B y si ha perdido mucho peso necesitará alimentarlo con sonda.
Durante el tratamiento el perro deberá restringir su actividad física y estar siempre caliente. Se recetarán medicamentos para reducir la acumulación de líquidos en el abdomen y tratar la infección.
El veterinario normalmente modificará la dieta del perro y establecerá una dieta que sea baja en sodio. Podría recetar también suplementos de tiamina y vitaminas.
Será necesario un seguimiento para asegurar la correcta evolución del tratamiento. El veterinario programará visitas de seguimiento en función de la gravedad.