Inflamación cerebral por infección parasitaria en perros
Urgencia: Lo antes posible
Pronóstico: Reservado

En ocasiones las inflamaciones cerebrales son debidas a gusanos u otros parásitos. La más típica es la provocada por las larvas de la tenia porcina y se denomina neurocisticercosis. Otras tenías con menor incidencia también provocan enfermedades como la cemurosis, la equinococosis o la esquistosomiasis

Síntomas

Los síntomas variarán dependiendo de la porción del SNC afectada. La lindarebriasis se caracteriza por la aparición repentina de cambios de conducta, convulsiones y problemas de visión. 

Las infecciones parasitarias son a menudo asimétricas, afectando a un lado pero no al otro.

Causas

La infección se produce cuando el perro ingiere algo contaminado con larvas de tenia.

Los huevos de las larvas van a parar al estómago y allí con las secreciones estomacales, eclosionan y salen las nuevas larvas que entran en el sistema sanguíneo y se distribuyen por todo el cuerpo y pueden ir a parar al cerebro o la médula espinal. Una vez llegan las larvas al cerebro o la médula espinal, forman unos quistes que cuando las larvas mueren generan una hinchazón o inflamación del cerebro.

Diagnóstico

El veterinario ordenará pruebas de resonancia magnético o tomografia computerizada para tratar de detectar los quistes en el cerebro. Si no fuera posible, también podría realizar una punción lumbar para ver si hay muchos glóbulos blancos luchando contra infecciones y poder confirmar así el diagnóstico.

Tratamiento

Existen fármacos para luchar contra las infestaciones parasitarias. El veterinario en función de la gravedad y el tipo de parásito decidirá cuál es el mejor tratamiento.

En algunos casos, a pesar de eliminar los parásitos, será necesaria la cirugía porque habrá que retirar los quistes que puedan quedar en el cerebro.