Obstrucción de los conductos biliares en gatos: colestasis
Urgencia: Lo antes posible
Pronóstico: Bueno

Colestasis es la condición en la cual la obstrucción del conducto biliar impide el flujo normal de la bilis desde el hígado hasta el duodeno. Puede ocurrir debido a distintas enfermedades subyacentes, entre ellas: enfermedades del hígado, de la vesícula biliar o del páncreas. Se presenta comúnmente en gatos de mediana edad y mayores.

Síntomas

Los síntomas de la colestasis pueden variar y dependerán de las otras enfermedades o condiciones que causan el problema. Los síntomas relacionados con la obstrucción de los conductos biliares en los gatos pueden incluir letargo, falta de apetito o hambre excesiva (también llamada polifagia), vómitos, ictericia, pérdida de peso, orina oscura, ictericia (decoloración de la piel o los ojos) y heces de color pálido.

Causas

Cálculos biliares, neoplasias, inflamación del páncreas, infestación parasitaria, traumatismos o efectos secundarios tras una cirugía abdominal son solo algunas de las causas subyacentes que originan la colestasis.

Diagnóstico

El veterinario primero preguntará por el historial médico del gato y por los síntomas detectados. Después, empezará por realizar un perfil químico de sangre, un hemograma completo y un análisis de orina, pruebas que revelaran anomalías relacionadas con la enfermedad subyacente y que suelen revelar un aumento de enzimas hepáticas. 

Adicionalmente, las radiografías abdominales y las imágenes por ultrasonido se pueden usar para examinar el interior del hígado, el páncreas y la vesícula biliar. En algunos casos, donde las pruebas de laboratorio y otras técnicas no son útiles para el diagnóstico, la cirugía exploratoria puede usarse para el diagnóstico. Si se descubre alguna forma de neoplasia, el veterinario determinará si el tumor es benigno o maligno. El tratamiento adicional dependerá de ese resultado.

Tratamiento

El tratamiento dependerá de la causa subyacente de la enfermedad. Si el bloqueo se produce por una inflamación, el veterinario optará por recetar antibióticos como la amoxicilina o el metronidazol. Si la obstrucción es por cálculos biliares, entonces optará por la disolución en orina o cirugía. Si es por hepatopatías tóxicas por fármacos se modificaría el tratamiento y si fuera por tumores se recurrirá normalmente a la cirugía. 

El gato necesitará restricciones dietéticas especiales mientras se recupera. La recuperación dependerá del tratamiento de la causa subyacente de la obstrucción y de la viabilidad del conducto biliar para la salida normal de los contenidos de bilis. El pronóstico de recuperación es generalmente bueno, dado que estos problemas tienen una buena solución salvo en el caso de encontrar un neoplasia como causa subyacente.