Esfuerzo a la hora de orinar (el perro se encorvará mientras orina). Debido al paso anormal de la orina puede salir orina turbia o un flujo de orina interrumpido. La orina puede ser oscura o teñida de sangre.
El dolor que causa orinar, provoca que el perro pueda llorar, dejar de comer y se deprima. También puede provocar náuseas o vómitos.