Policitemia en perros: Sobreproducción de glóbulos rojos
Urgencia: Atención inmediata
Pronóstico: Reservado

La sobreproducción de glóbulos rojos es una enfermedad que puede ser grave y debería tratarse sin dilación.

La sobreproducción de glóbulos rojos puede ser relativa, transitoria o absoluta. La relativa se produce cuando por culpa de la deshidratación ha disminuido el nivel de plasma provocando una mayor concentración de glóbulos rojos, la transitoria se produce cuando una acumulación de epinefrina (hormona que reacciona al estrés, ira o miedo) provoca una mayor producción temporal de glóbulos rojos y la absoluta cuando encontramos más glóbulos rojos en la sangre por culpa de una sobreproducción de la médula ósea.

La policitemia absoluta puede dividirse en dos: la primaria que ocurre cuando la médula ósea sufre un trastorno que provoca una producción incontrolada de glóbulos rojos y la secundaria que se produce cuando hay una producción excesiva de la hormona eritropoyetina (EPO) en los riñones por un mal funcionamiento de este órgano o por una falta de oxígeno crónica. 

Síntomas

Vómitos, diarrea, poca sed, excesiva micción, letargo, intolerancia al ejercicio, encías de color rojo oscuro o azuladas, estornudos, hemorragias nasales y abdomen hinchado

Causas

Las causas dependen del tipo de policitemia que sufra el perro. Podemos encontrar una pérdida de líquidos por vómitos, diarreas o deshidratación, enfermedad en los riñones, trastornos mieloproliferativos de la médula ósea, enfermedades pulmonares, enfermedades cardíacas, quistes en el riñón, tumores, glándula tiroidea o suprarrenal hiperactivas o simplemente un cambio de altitud.

También pueden causar la policitemia alteraciones en el estado de ánimo: excitación, miedo, ansiedad,…

Diagnóstico

El veterinario realizará un examen completo porque pueden existir múltiples causas. Lo primero será realizar un análisis de sangre para determinar los niveles de oxígeno y de EPO. 

Las imágenes de los principales órganos también deberían realizarse con ultrasonidos o radiografías para determinar enfermedades subyacentes o posibles causas. Las imágenes servirán también para evaluar la función de los riñones y del sistema cardiopulmonar. La ecocardiografía, por su parte, se utiliza para evaluar las funciones cardíacas. Además, un patólogo examinará una muestra de médula ósea. 

Tratamiento

Depende de la causa subyacente. Si el veterinario encuentra demasiados glóbulos rojos, puede extraer el exceso mediante una apertura en vena (flebotomía). La flebotomía es una técnica utilizada para extraer sangre que no está libre de riesgo ya que puede provocar un shock hipovolémico por extraer demasiada sangre y la posibilidad de una crisis trombótica. Para minimizar los riesgos, durante la extracción se administra fluidos simultáneamente como soluciones coloidales de dextranos. 

Agunos casos serán ambulatorios y requerirán la administración de medicamentos como la hidroxyurea para controlar los efectos de la enfermedad. Con un buen control, el perro podría vivir años sin una disminución significativa en su calidad de vida.

La mascota necesitará de monitoreo por parte del veterinario para asegurase que haya un volumen celular normal.  En el caso que la médula ósea no funcionara bien, se aplicaría terapia de fluidos y medicación.