Es muy habitual que sea asintomático. Los síntomas que pueden aparecer son letargo, pérdida de apetito, distensión abdominal y estreñimiento. Si el quiste comprime el recto: dificultad para orinar y si comprime la uretra: secreción uretral.
Los quistes prostáticos son cavidades llenas de líquido sin gérmenes que se encuentran en el interior de la próstata. Distinguimos entre los quistes parenquimatosos que se encuentran en el interior y los paraprostáticos que se encuentran pegados a las paredes de la próstata.
Los quistes prostáticos suelen ser asintomáticos hasta que adquieren un tamaño suficiente para bloquear la próstata o hasta que se infectan.
Son frecuentes en perros machos no castrados de razas grandes.
Es muy habitual que sea asintomático. Los síntomas que pueden aparecer son letargo, pérdida de apetito, distensión abdominal y estreñimiento. Si el quiste comprime el recto: dificultad para orinar y si comprime la uretra: secreción uretral.
Las causas no están claras. Se sospecha que pueden tener que ver con vestigios embrionarios de los conductos de Müller o a la obstrucción de los conductos glandulares por problemas en la próstata.
El veterinario primero realizará una inspección física en búsqueda de abultamientos en la zona perineal.
El veterinario utilizará los ultrasonidos para analizar los quistes en la próstata. Lo normal será utilizar una fina aguja para extraer líquido del quiste y poder analizarlo (aspiración con aguja fina).
El tratamiento de los quistes depende del tamaño y de la ubicación.
Si son pequeños, normalmente pueden tratarse con medicación. Y si ya son más grandes, también habrá que drenarlos para vaciarlos.
Lo más apropiado para evitar problemas es la castración.