- Posible cambio de color del iris
- Mancha(s) oscura(s) en la superficie del ojo
- Iris grueso e irregular
- Posible glaucoma secundario (presión alta en el ojo)
- Pupila dilatada
- El globo ocular agrandado (abultado)
Lleva a la ceguera
Tumor en el ojo en gatos
Urgencia: Puede esperar
Pronóstico: Reservado
Pronóstico: Reservado
Los melanomas uveales surgen en la parte frontal de la superficie del iris, extendiéndose a los cuerpos ciliares y coroides. Los tumores tienden a ser planos y difusos, no nodulares con un aspecto clínico y celular benigno. Se caracteriza por el crecimiento de células de apariencia oscura debido a la inclusión del pigmento de la melanina.
Los melanomas uveales son la neoplasia intraocular primaria más común en gatos y, por lo general, afectan con mayor frecuencia a la úvea anterior. Los melanomas uveales anteriores tienen una tasa del 4% de propagación cancerosa a través del torrente sanguíneo a los pulmones y órganos viscerales.
Síntomas
Causas
Los melanomas uveales aparecen sin razón aparente y, en otros casos, las pecas planas y pigmentadas del iris tienen potencial para transformarse en melanomas. Existe la posibilidad de una herencia autosómica (no ligada al sexo).
Diagnóstico
El veterinario realizará un examen físico completo del gato junto a un perfil sanguíneo químico, hemograma completo, análisis de orina y panel de electrolitos. Los resultados del perfil sanguíneo pueden revelar evidencia de metástasis. Igualmente, el recuento sanguíneo puede mostrar un aumento de glóbulos blancos, lo que podría ser indicativo de que el sistema inmunológico del cuerpo lucha contra el crecimiento de células malignas.
Adicionalmente, el veterinario hará un examen oftalmológico completo para medir la presión en los ojos y usará una gonioscopia para ver si el melanoma se ha extendido al ángulo de drenaje. La biomicroscopía con lámpara de hendidura se puede emplear para medir el tamaño y la ubicación de la masa.
Tratamiento
El veterinario tratará de ver si el melanoma se extiende o no. En principio realizará un control de los cambios del ojo cada 2 meses para ver como se comporta el melanoma. En caso que tuviera claro que se extiende, la extirpación del ojo afectado es el tratamiento sugerido de lo contrario, la masa se extenderá dentro del ojo y la función visual estará significativamente alterada.
A los animales a los que se les ha extraído el ojo pueden adaptarse rápidamente al cambio en la capacidad visual. Si su gato desarrolla glaucoma como consecuencia de un melanoma uveal, es probable que su gato sufra mucho dolor de cabeza.
Si se ha tenido que extirpar el ojo, el veterinario programará citas de seguimiento para realizar radiografías y ecografías a los 6 y 12 meses para comprobar la recurrencia del tumor o metástasis.